VIVERE E SENTIRE.

VIVERE E SENTIRE.
Vivo sin vivir en mi.

People.

viernes, 15 de noviembre de 2019

Velada número 403

Otra vez. Tus ojos inyectados en sangre y mis labios secos susurrando algo muy turbio. Aprietas la soga que rodea mi cuello, que me oprime la garganta y a la vez cosquillea mi nuca. Qué sensación. De ahogo hasta el dolor y de cosquilleo hasta el placer.
Deleite y miedo. Necesidad y orgullo. Ambigüedad y cinismo. Monet y Pollock. Botticelli y Rembrandt. Tú y luego tú, y se acaba y sigues siendo tú; y ya no hay soga, y la necesito. 
¿Necesitas lo que te duele porque te da placer? ¿Te da placer que te duela? ¿Te gusta algo que no te pueda llegar a doler? ¿O todo lo que se ama duele?
TE QUISE A RABIAR

Un día de octubre

Y sin querer voy acumulando días vacíos, ganas perdidas, recuerdos con mucho polvo, y un corazón que late por inercia.  
Cuando te entregas no hay manera de regresar, 

porque vuelves vacía y sin ser la misma.

2:10

Pasan los días e incluso algún que otro mes. Y quizás todo esté más estable, los días son prácticamente iguales, y tú, bueno ese es el factor cambiante que hace que mi vida esté tan estable como inactiva. Cada vez te veo pasear menos por mi cabeza, casi no recuerdo tu voz y tus ojos ya me parecen difusos. Aunque no te voy a mentir, con esa poca nitidez con la que te me apareces, te impones en mi cabeza como si de nuevo tomaras las riendas de ella, y por fin quisieras hacerme feliz. Y en ese halo de esperanza apareces con más fuerza; mi protección y a la vez mi destrucción, el recordar por qué mi vida se ha vuelto tan estable, porque tu recuerdo se vuelve cada vez más turbio y lejano, porque no estás... 
Y no estás porque no quisiste permanecer, no quisiste luchar, no quisiste intentar, no te dejaste querer y cuidar. Porque te di todo mi corazón y no era suficiente, porque estuve dispuesta a derramar toda mi dignidad por estar a tu lado, porque agoté todo mis cartuchos y ni uno te rozó, porque aunque te quiero a rabiar he entendido que no eres para mí, ni soy para ti. 
Tú no te mereces tanto y yo no me merezco tanto infierno.

Future

A veces tengo una necesidad imperiosa de tener pareja, de dar todo el amor que tengo, que a veces se me va derramando. De compartir tiempo, de sonreír más de seguido, de mirar a alguien con la sensación de plenitud de quien tiene todo sin poseer nada, de que mi manos encuentren un lugar, de dormir en un pecho, de amar mucho, muy fuerte. 
Y siempre se me viene la misma persona a la mente. Y sé que no es posible. Y vuelvo a entender que todo eso que deseo primero me lo tengo que regalar a mí; porque me lo merezco, porque me lo debo, porque antes de compartir tanto de mí, tengo que adorar todo lo que tengo, saber que mi fortaleza será el hogar de alguien que lo amará. 

lunes, 10 de junio de 2019

Mayo

Y me quedé ahí, donde convive lo que nunca va a nada. Donde se refugia el miedo, donde van a parar las esperanzas, donde se guarda el tiempo perdido. Donde todo es denso, y te dilatas, donde se estiran los pensamientos hasta hacerse almohadas, los cuales aparentan ser refugio y en cambio son el enemigo acechando.
Me quedé ahí, ahogada en el susurro y en el suspiro, observando aún tus ojos distraídos, y también me observé a mí, ilusa creyendo que algún día... Ahí ahí, en el algún día es donde vivo ahora, esperando a que detone de una puta vez esta sensación de que aún nos debemos algo, y se deshaga mi propio látigo con el que me recuerdo lo bonito que fue..., pero para mí.